Vistas de página en total

9 ago 2018

SUEÑOS


Un nuevo y fulgurante día,
se adormece en el lecho de mi vientre.
Cálidas perlas salinas,
discurren tímidamente,
abriéndose paso,
a través de mis dunas ardientes.
Mi mente etérea y  recelosa,
despliega sus áureas alas sedosas.
En tu ausencia, dulce amargura,
la vida se me antoja plúmbea.

¿Cómo desvanecerme en un sueño,
 y, fundirme en ti, mi dueño?
¿Cómo dominar las mareas de mi mente,
sin rasgar el velo del presente?
Y, como la diosa Artemisa,
sin descanso, incesante,
rastreo la huella de tu alma errante.
Cada noche,
atisbo un  hálito de esperanza;
Morfeo lo alimenta,
él lo amamanta.

Escarcha ardiente,
que abrasa mi alma impaciente.
Pasión temerosa,
que se adormece al alba impetuosa.
Amordazar a Cronos quisiera,
que devora sin piedad
mi más ansiada quimera.
Mas, heme aquí,
ante ti,
custodio del fuego de mi alma antigua,
portando receloso,
la llama de Prometeo piadoso.
Y así, fundidos en esta pasión estival,
muero en mí,
para renacer en ti,
y vuelta a empezar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario